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Blog de Belén Serrano

Docencia

Consejos para orientadores

El otro día tuve como público destinatario de mi charla de "Orientación para las familias" a los alumnos de psicopedagogía de la Facultad de Educación de Zaragoza. Están interesados principalmente en los aspectos prácticos de la orientación. Chicos jóvenes sin hijos deben ser referentes educativos para padres primerizos o no en contextos educativos, ya sea de educación reglada como no formal.
Estos son los consejos fundamentales:
- El respeto a la familia. No juzgar ¿Quién eres tú para valorar si lo que hace esta familia está bien o mal?
- La escucha y la empatía. No decir lo que tenemos claro a la primera. Escuchar con paciencia y sutilmente preguntar ¿Te gustaría saber lo que las teorías del aprendizaje dicen al respecto?
- Relajar a la familia y nunca imponer. No empieces la frase con "Lo que tienes que hacer es"
- Decidir conjuntamente los objetivos y los criterios para actuar. No propongas tú solo, decide con los padres las pautas de actuación y asegúrate de que han comprendido cómo deben llevarlas a cabo.
- Establece los plazos para evaluar la medida.
Aparte de todos estos consejos, es importante que tengas claro que el orientador sabe mucho de teoría, pero como suele decirse "cada familia es un mundo", por lo que repito es importante aconsejar desde el respeto, al comprensión y, por qué no, el cariño.

¿Ha cambiado el comportamiento de los jóvenes en las actividades de tiempo libre?

La sociedad cambia y los jóvenes cambian. Yo diría que todo está en un continuo proceso de adaptación. Y mientras los padres se adaptan a la sociedad que les toca vivir, los jóvenes se hacen hueco en su propio sistema familiar, escolar y social.

Si nos referimos a la actitud en los campamentos de verano, el comportamiento de los jóvenes no ha variado mucho. En un contexto bien estructurado, tanto espacial como temporalmente hablando,  si el joven desde el primer día tiene claras unas normas y unos objetivos a desarrollar, es complicado que desarrolle conductas complicadas. 

Lo positivo de la realización de estas actividades es que el joven durante quince días se encuentra con una forma de vida bastante diferente a la que realiza en su vida cotidiana. ¡Todavía no hemos encontrado un campamento de verano en el que haya ordenadores! Sí que aparecen juegos de chicas adolescentes con la comida, chavales con enuresis o jóvenes que intentan consumir drogas...pero éstos no llegan a ser significativos si se corrigen a tiempo.

Si nos referimos a la actitud del joven en las actividades durante el año, podemos encontrar situaciones derivadas de crisis familiares, chicos solos, chicos egocéntricos y chicos tiranos que no tienen las habilidades sociales necesarias para integrarse con normalidad en un grupo. Las estrategias educativas que se realizan en estas actividades con los monitores-educadores son fundamentales para que el joven descubra que puede mejorar su comportamiento y su actitud, así como reflexionar sobre sí mismo y su papel en la sociedad.

Ocio y tiempo libre para la discapacidad

La importancia del ocio y tiempo libre en las personas en general es algo que nadie discute en el mundo occidental. Para las personas jóvenes con discapacidad, esta necesidad también existe, pero las dificultades para poder participar en las actividades  son muchas.  Estos jóvenes pasan mucho tiempo en casa, solos o acompañados, y dependen de los demás para la realización de gran parte de sus tareas. Ver la televisión es una de sus prácticas habituales. Ahora con las nuevas tecnologías se ha abierto otro campo de disfrute para el que tiene capacidad para ver y escribir. Salir a pasear, ir al cine, ir a tomar un refresco, salir a bailar, viajar, leer...son algunas de las actividades que a los jóvenes les gusta.

Por un lado, tienen dificultades físicas derivadas de su discapacidad y, por otro lado, tanto ellos como sus familias, se enfrentan a las miradas y a los comentarios de la gente que, sean ciertos o no, ellos lo viven con gran angustia. Actualmente, en las políticas europeas, priorizan las ayudas a la emancipación y promueven leyes que favorecen la igualdad de oportunidades y la accesibilidad en general.

En todos los países, son las entidades sin ánimo de lucro las que favorecen los planes de ocio y tiempo libre de sus socios, muchas de las cuales son apoyadas económicamente por las políticas de juventud y de servicios sociales. Los costes de estas actividades son muy elevados, ya que tanto el personal como las ayudas técnicas necesarias son muy costosos, pero hay que seguir potenciándolos, ya que está en juego la salud psicológica de todas estas personas. 

Sería importante que en estos tiempos de crisis lo que se reduzcan no sean las ayudas sociales y que el avance en la inclusión se mantenga y avance.

Trastornos del comportamiento en personas con discapacidad intelectual grave

La mayoría de las personas con discapacidad intelectual grave presentan problemas de conducta. Estos son muy variados: chuparse las manos, presentar rabietas, darse golpes, balancearse. Estos problemas afectan a su capacidad de aprendizaje y a su capacidad de adaptación en el entorno.

La intervención de personal auxiliar y de sus familias es complicada. Deben aplicarse técnicas derivadas de la psicología del comportamiento con programas muy estructurados, en los que lo fundamental es el objetivo funcional que se persigue. Es decir, lo importante es que María deje de morderse el labio cuando se pone nerviosa porque se hace sangre, o que Mario aprenda a tragar la comida para que pueda alimentarse adecuadamente. La función de la modificación de conducta es conseguir que las personas no se hagan daño, no hagan daño a los demás y puedan realizar las Actividades de la Vida Diaria, como son el alimentarse, vestirse, andar, etc.

Un autor llamado Carr en su libro "Intervención comunicativa sobre los problemas del comportamiento" plantea que la causa de estas conductas es la dificultad de estas personas para comunicarse. Es su forma de expresión, ya que los cauces habituales para hacerlo no existen o están deteriorados.

Las técnicas a aplicar están todas expuestas en los libros sobre Psicología del aprendizaje y de Modificación de Conducta.